Prótesis dental

Protesis fija

La prótesis fija es la prótesis de coronas y puentes. Este tipo de prótesis van sujetas sobre dientes naturales que, previamente, se han tallado o limado con el fin de rebajarlos lo que sea necesario para que, sobre ellos, asienten los dientes artificiales.

- En el caso de las coronas, si la pieza sobre la que va a sujetarse la corona o diente artificial está muy destruida, puede ser necesario insertar en la raíz del diente un poste o perno que le confiera estabilidad y retención a la corona. Para ello, será necesario, previamente, desvitalizar el diente mediante una endodoncia.

- Para realizar un puente de 2 ó más piezas o coronas artificiales, es necesario que haya dientes naturales tanto por delante como por detrás del espacio donde, antes de perderse, se encontraban los dientes naturales.

También es necesario que los dientes que van a servir de soporte o pilares del puente estén en buenas condiciones. Tras el limado de éstos, se coloca una estructura sobre ellos, de forma que los pórticos o dientes falsos que rellenan el espacio hueco queden sujetos y se apoyen sobre los dientes limados que actúan como pilares.

Este tipo de prótesis fija es cómoda y duradera, pero no tanto como los implantes dentales.

 

Prótesis removible

Es aquella que se apoya en la encía y se sujeta a los dientes naturales que quedan en la boca mediante ganchos retentivos.

Recomendamos su uso sólo de forma provisional y temporal. Resulta más incómoda y menos estable y estética que la prótesis fija y los implantes dentales.